EL TIEMPO Y EL OCIO

El carácter y la carrera de un joven dependen de cómo usa el tiempo libre. No podemos reglamentar las horas de la escuela o de la oficina -ya están determinadas para nosotros- pero podemos decidir lo que haremos antes y después. La forma en que usemos las horas que nos sobran después de haber hecho provisión para el trabajo, las comidas y el descanso, determinará si nos desarrollaremos como personas mediocres o poderosas. El ocio es una gloriosa oportunidad y un peligro sutil. Cada momento del día es un regalo de Dios que merece cuidado, porque de cualquier forma que se lo mida, nuestro tiempo es corto, y la obra es grande.